
(LUIS AGÜERO WAGNER) Aunque la prensa dedica grandes espacios al acuerdo de Hugo Chávez con Fernando Lugo, ignora olímpicamente los documentos firmados con Uribe.
La prensa paraguaya informó el viernes 5 de setiembre de 2008 que la embajadora de los Estados Unidos en Paraguay, Liliana Ayalde, sugestivamente visitó al ministro del Interior, Rafael Filizzola.
En la ocasión, la representante de George W. Bush enfatizó el interés de su país de “apoyar y acompañar los programas” de seguridad de Paraguay. La diplomática no descartó una cooperación para el fortalecimiento de la Policía Nacional, que se realizaría en el marco del Programa Umbral. Ver:
www.abc.com.py/2008-09-05/articulos/447990/ee-uu-apoya-programa-de-segur
La diplomática acotó que “básicamente estuvimos repasando lo que la cooperación del Gobierno de Estados Unidos ha venido trabajando y algunos temas posibles para el futuro”. Añade que hablaron de “algún posible apoyo a la Policía”.
El tipo de “apoyo” en la materia que ha brindado Estados Unidos en el pasado a Paraguay es bien conocido por quienes sufrieron cárcel, destierro y tormentos en los centros de detención que bajo la atenta mirada de la CIA norteamericana, mantuvo el dictador anticomunista Alfredo Stroessner entre 1954 y 1989.
Pocas semanas después, el obispo y su ministro del interior viajaron a Colombia, donde la embajadora Ayalde dirigió la oficina de USAID, para firmar acuerdos con Alvaro Uribe.
Durante los último cinco años, 23 mil peronas fueron asesinadas por la inseguridad del país del cual el obispo busca importar medidas represivas.
ACUERDOS CON URIBE
"Con radicalidad, con serenidad, pero con firmeza hemos condenado todo tipo de violencia: pequeña, grande, ideológica, guerrillera, de ejércitos irregulares... ningún tipo de violencia cabe en nuestra mentalidad y no tendrá cabida en nuestro país mientras nosotros seamos Gobierno", dijo el supuesto teólogo de la liberación tercermundista Fernando Lugo abrazado al narco-presidente de Colombia Álvaro Uribe, el lunes 29 de setiembre de 2008 en Bogotá.
Se entiende de sus declaraciones una tácita condena a las FARC, a pesar de que la teología de la liberación es un movimiento que cobró auge a través de religiosos adscriptos al movimiento marxisto-guerrillero latinoamericano.
Antes de concluir su visita de 24 horas, Lugo ya había pasado del dicho al hecho en materia de cooperación y anunció que su ministro del Interior, Rafael Filizzona, se queda unos días en Colombia para que las autoridades paraguayas se capaciten en temas de seguridad y secuestro.
"Se queda el Ministro del Interior para contactar y concretar los aspectos de cooperación en la formación de Policía antisecuestro en Paraguay y para que la Policía de Paraguay pueda venir a hacer cursos aquí en Colombia (...) También está el ofrecimiento de que vayan profesores de la Policía Antisecuestro de Colombia a impartir clases y experiencias (en Paraguay)", comentó Lugo en la conferencia de prensa.
Precisamente el mismo secretario de estado hace poco había recibido la visita y las instrucciones de la representante del terrorista en jefe del mundo libre, George W. Bush, en su mismo despacho en el ministerio del Interior.
La penetración de los organismos de seguridad en América Latina durante el siglo XX constituye, sin ninguna duda posible, uno de los episodios más siniestros y vergonzosos en la historia del imperialismo
TORTURAS EN CENTRO DE DETENCIÓN Y MAS ASESINATOS
Una grave denuncia fue realizada por abogados de una activista del guevarista Partido Patria Libre, detenida por un supuesto secuestro de connotaciones polìticas, llevado a cabo cinco años atrás. Carmen Villalba, una paraguaya detenida por un supuesto secuestro en Paraguay, fue salvajemente torturada y reprimida en su lugar de detención luego de realizar declaraciones a una radioemisora en contra del gobierno del Obispo Fernando Lugo, según denunció su abogada, Raquel Talavera.
Carmen Villalba, activista vinculada al guevarista Partido Patria Libre de Paraguay, ha denunciado por medio de sus abogados que fue torturada en prisión luego de realizar declaraciones en contra del Obispo Fernando Lugo. Las represalias en su contra incluyeron aislarla en una jaula y privarle de agua, medidas públicamente defendidas por la directora del centro de detención ante un medio de comunicación.
Varios acuerdos en materia de represión quedaron anunciados por una reunión entre la embajadora Liliana Ayalde y el ministro del Interior Rafael FIlizzola, quien casualmente viajó poco despues a Colombia, donde Ayalde fue jefa de USAID, para firmar acuerdos en materia represiva con Alvaro Uribe.
En una entrevista realizada por medios de Paraguay, la detenida condenó al gobierno del clérigo-presidente por reprimir a campesinos sin tierras en defensa de brasileños, y reivindicó la opción de la revuelta, aún violenta, contra la opresión establecida.
La respuesta del gobierno no se hizo esperar, y consistió en descalificar las palabras de la torturada por tratarse detenida, aunque haya sido bajo el gobierno anterior al que llenaron de adjetivos y acusaron de persecución política durante todo el proselitismo que los llevó a ganar las elecciones del 20 de abril.
El obispo Fernando Lugo también aprovechó la ocasión para condenar la lucha armada y a los movimientos que optan por este tipo de Rebelión en América Latina, en gesto curioso dado que se lo promocionaba como partidario de la Teología de la Liberación, una corriente fuertemente influenciada por el marxismo-guerrillero de Amèrica Latina.
Paralelamente, más campesinos aparecen asesinados en el interior del país como resultado de los reclamos por una reforma agraria real, y los dirigentes responsabilizan a la Asociación Rural del Paraguay, apañada por el gobierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario